Con varios días de antelación a la fecha prevista Ciego
de Ávila se integró a la zafra azucarera con la arrancada de los equipos en la
Unidad Empresarial de Base Ciro Redondo.
Ese colectivo tiene el propósito de alcanzar molidas
estables y eficientes con el ahorro de portadores energéticos, luego de
efectivas reparaciones caracterizadas por la labor innovadora y costosas
inversiones en el área industrial.
Iniciadores de la zafra en Ciego de Ávila, los obreros
del ingenio Ciro Redondo tienen el compromiso de ubicar otra vez su fábrica
entre las mejores del país, las pruebas previas a la arrancada aseguran calidad
en los diferentes trabajos.
En el territorio avileño se incorporarán este mes los
centrales Ecuador y Primero de Enero, mientras el Enrique Varona arrancará sus
molinos en el mes de enero, todos con la garantía de un ligero crecimiento
cañero.
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